Davidson aterriza en Palma
Pablo Pinto - La moda de los multimillonarios comprando clubes de fútbol a su antojo continúa. Y sigue relacionado con el fútbol inglés. En esta ocasión no es ningún magnate extranjero el que se hace con un club británico, sino un empresario inglés el que ha comprado el Real Mallorca.
El compromiso entre Davidson y Binipuntiró y SLU, las empresas que tenían el porcentaje mayoritario de la entidad bermellona, se cerrará en torno a los cuarenta millones de euros (por un 92% de las acciones del club). Una cantidad que se antoja irrisoria con las que han pagado otros magnates por equipos de la Premier. Por el Manchester City se abonó una cantidad cercana a los 250 millones de euros.
De momento no se prevé un cambio radical en el Real Mallorca. Por lo pronto Vicente Grande seguirá siendo el presidente. Al menos ese es uno de los argumentos por los que el propio Grande rechazó la oferta Dietrich Mateschitz, el propietario de Red Bull, que también se interesó hace poco por el equipo insular.
La oferta del dueño de la 'bebida con alas' era mayor que la de Davidson, por lo que en Palma no terminan de ver trasparente la operación. Sobretodo con la deuda que traían las empresas de Grande, debido a la crisis del ladrillo.
El fontanero de oro
La fortuna de Davidson proviene de ser el propietario del grupo Fluid Leader, especializado en tuberías, oleoductos y demás fontanería de envergadura.
Cuando un millonario de este estilo compra un equipo de fútbol existen dos tipos de personajes: Los que lo hacen para apoyarse en el reconocimiento social que da presidir un club de fútbol para sacar tajada en sus negocios (a lo Piterman) o cuando lo quieren como un capricho y es su juguete. Vamos, como cuando a nosotros nos traían ‘los reyes’ el PcFútbol.
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