miércoles, noviembre 29, 2006

La última extravagancia de David James

La carrera de David James está plagada de excentricidades, locuras, absurdos y más de una manía. La última extravagancia de James ha sido cortarse el pelo a lo Super Héroe barato y parece más un personaje de cómic que un jugador de fútbol. James nos hace volver a la década de los 40 y los tabloides ingleses han encontrado en el portero del Manchester City un auténtico filón.
Desde sus comienzos como portero, James ha englosado en la larga lista de jugadores que rozan el ridículo dentro y fuera del campo. Se ganó el apodo de "calimity" James por sus clamorosos errores aunque la carencia de importantes guardametas en las islas le ha hecho ser internacional en numerosas ocasiones. Se ha cambiado de corte de pelo tantas veces como Beckham aunque con un resultado algo distinto.
No es un mal portero pero sus escandalosos fallos en momentos clave, le condenaron a la mediocridad.
El hoy portero del City argumentó haber perdido reflejos en su etapa en el Liverpool. El motivo no era su falta de entrenamiento sino su adicción a las consolas. Toda una declaración de intenciones y una frase más para incrementar la leyenda de James. Este fin de semana nos presentó su nuevo peinado...

lunes, noviembre 27, 2006

Ni Zigic ni Koller ni Carew... Tony Cascarino


Ahora que están tan de moda en el fútbol de hoy los jugadores de dos metros, es bueno recordar a uno de los pioneros en demostrar que, con una altura más propia de un jugador de baloncesto, se puede ser un gran futbolista. Hablamos de Tony Cascarino uno de los futbolistas más importantes de la historia de Irlanda. Junto con hombres como John Aldridge, Ray Houghton o Paul McGrath formó parte de la mejor generación que ha dado el once del trébol.

Su carrera fuera de la selección se desarrolló entre Inglaterra y Francia. Iba para peluquero pero sus ganas de jugar al fútbol pudieron más que las tijeras. En el Gillingham empezó a dar sus primeros pasos como profesional. Debutó en la temporada 81-82 y hasta el año 87 jugó con el modesto Gillingham en el pozo de la tercera división. Fue en el Millwall donde Cascarino encontró su verdadero yo futbolístico. Entre 1987 y 1990 formó pareja atacante con Teddy Sheringham. Una de las duplas más letales que ha dado nunca la liga inglesa. En su primera campaña en el Millwall consiguió el ascenso a la primera división con 42 goles entre los dos atacantes. Cascarino era uno de los delanteros más codiciados del mercado en 1990. Al mismo tiempo que vivía su primer Mundial con Irlanda fue traspasado al Aston Villa en uno de los momentos más dulces de su carrera.

Sin embargo, nunca llegó a triunfar en Villa Park y en 1991 ingresó en las filas del Celtic. Su paso por el conjunto escocés prometía mucho pero se quedó en nada. Después vinó el Chelsea de Glenn Hoddle, el último Chelsea con sabor británico antes de la invasión foránea. En 1994, Cascarino decidió probar suerte en Francia. Nancy y Marsella fueron sus equipos en la liga gala. En el Marsella convivió con un equipo muy perjudicado por los continuos escándalos de la era Bernard Tapie. El Marsella ganó la Copa de Europa en 1993 pero descendió en los despachos al estilo de la Juve este verano. Cascarino Logró el ascenso con el Marsella y fue uno de los encargados del renacer del Olympique tras los escándalos principios de los 90. Se trataba de una de las últimas grandes hazañas de Cascarino, un auténtico mito del fútbol irlandés.

Retirado en el año 2000 pero siempre vinculado al fútbol, Tony Cascarino escribe ahora una de las columnas más leídas por los aficionados ingleses en The Times. También ha tenido tiempo de escribir una autobiografía donde reconoció haberse dopado en su época en el Marsella creando un auténtico terremoto en Francia. A todo el buen aficionado al fútbol le aconsejamos que lean a Cascarino en The Times y que si encuentran su autobiografía (titulada full time) no duden en echarla un vistazo. Jugadores como Tony Cascarino siguen teniendo cabida en el fútbol de hoy, era capaz de rematar hasta cochinillos como bien definía su fútbol Michael Robinson en el día después. Sus herederos están en la élite: Crouch, Carew, Zigic...

sábado, noviembre 25, 2006

365 días sin un genio llamado George Best


Como bien nos recuerda Enrique Laméyer en diarios de fútbol, hoy se cumple un año de la muerte de uno de los futbolistas más importantes de la historia. George Best fallecía debido a una debilidad que le condenó durante toda su vida, el alcohol. Su hígado dijo basta y uno de los trozos más importantes de la historia del balompié tocaba a su fin.

Su fútbol era el de un genio y decenas de libros, videos y artículos aún se realizan hoy recordando la figura del quinto beatle, del chico de Belfast, de uno de los miembros de la gran generación de los Busby Babes. Su admiración fue capaz de unir a un país dividido, Irlanda del Norte. Sus patillas, sus regates, sus frases, su peculiar estilo, son hoy y serán siempre recordadas por el buen aficionado al fútbol.

Precisamente para inmortalizar el recuerdo de Best y de dos de sus compañeros más míticos, Bobby Charlton y Dennis Law, el Manchester United ha aprobado un plan para crear una estatua dedicada a los tres ex jugadores como la que ya existe de Matt Busby en los alrededores Old Trafford. Unas estatuas con la efigie de las tres leyendas prevista para 2008. Una buena forma rendir tributo a tres genios.

Frases de Best para el recuerdo...

"Gasté mucho dinero en alcohol, mujeres y coches. El resto lo desperdicié"

"En 1969 dejé las mujeres y la bebida, pero fueron los peores veinte minutos de mi vida”

"Si yo hubiese nacido feo, nunca hubiérais oido hablar de Pelé"

“Hace años dije que si me daban a elegir entre marcar un golazo al Liverpool o acostarme con Miss Mundo iba a tener una difícil elección. Afortunadamente, he tenido la oportunidad de hacer ambas cosas”

miércoles, noviembre 22, 2006

Descafeinado y decepcionante Celtic-United

Como en las mejores corridas de toros, gran cartel; dia de expectación y dia de decepción. Los novilleros invitaban a una corrida espectacular dentro de un marco imcoparable como Celtic Park. Sin embargo, la tan esperada Batalla de Gran Bretaña, en su capítulo número 2, acabó siendo una aburrimiento para los aficionados que se pusieron a ver el encuentro y a buen seguro para los que lo vieron en Glasgow.

El Celtic y el United salieron pensando en el empate como buen resultado para ambos conjuntos y así se desarrolló casi todo el encuentro. El United se dedicó a mover la pelota de lado a lado sin profundidad alguna y el Celtic a esperar y poco más. Todo lo contrario del partido que se jugó en Old Trafford. Ferguson no quería repetir los errores de Copennaghe pero el equipo no jugó a lo que sabe, que es al ataque, y acabó pagándolo. El Celtic se encontró con el talento de su jugador con más calidad, Nakamura, que marcó de la misma manera que en Manchester, sensacional gol.

Strachan saltó del banquillo con cara de haberse sorprendido mucho del gol del japonés ya que el Celtic ni había olido el área de Van der Sar, más o menos igual que los red devils. En los de Ferguson, sólo las ganas de Cristiano Ronaldo pusieron emoción al partido, el resto estuvieron ausentes. Al final, el United desperdició un penalti que le hace jugarse el tipo con el Benfica en la última jornada. Parkhead sigue siendo un fortín y una fiesta aunque esta vez sólo hubo fiesta en las gradas, eso nunca cambiará.

foto: bbc.co.uk

lunes, noviembre 20, 2006

Nada novo en el derbi gallego

Nacho Novo marcó y dio la victoria al Glasgow Rangers ante el Hearts en un partido decisivo para las aspiraciones del conjunto de Ibrox Park. No es la primera vez ni será la última que este emigrante gallego salva al Rangers en la liga escocesa y ya lleva muchos años demostrando que es un buen jugador. Curiosamente, en el fútbol gallego no dejamos de oir críticas de la afición y de la prensa reclamando más protagonismo de futbolistas gallegos en los dos grandes equipos de la región, el Celta y el Deportivo.
En el derbi gallego, el Celta se llevó el partido en Riazor pero una vez más la presencia de jugadores gallegos fue casi nula. Oubiña y poco más. Mientras tanto, Nacho Novo lleva en Escocia jugándose el tipo desde ya hace mucho tiempo y ni Celta ni Depor se han fijado en él y dudamos mucho que los delanteros de Celta y Depor sean mejores que Novo, seguramente en la secretaría técnica de Celta y Depor piensan que Nacho Novo es un actor y han visto más películas de Nancho Novo que partidos del Rangers, en fin....
El delantero gallego lleva desde 2001 en Escocia, comenzó en el Raith Rovers y posteriormente ingresó en las filas del Dundee FC. Tres temporadas en el Dundee FC y en 2004 dio el gran salto y fichó por el Rangers consiguiendo espectaculares registros goleadores. En ese momento tampoco los ojeadores de Celta y Depor se fijaron en él. No debe de ser tan complicado poner la tele y ver algún partido de Champions y ver los partidos que jugó Novo con los protestantes. No sabemos si es desconocimiento o falta de interés en un jugador que no me cabe ninguna duda le encantaría jugar en un grande su tierra. Las lesiones le han impedido evolucionar más pero parece que vuelve a ser el jugador decisivo que necesita un Rangers en plena crisis. Esperemos que Caparrós y Vázquez se fijen en él o al menos que sepa la gente que si no hay gallegos es porque no quieren.

domingo, noviembre 19, 2006

Los gold-posts

Brit Corner inaugura un nuevo bloque en nuestros destacados dedicado los reportajes más interesantes publicados en el blog en nuestra corta historia de vida. Una recopilación de los mejores post, sobre todo de aquellos que perdurarán el tiempo y estarán siempre por encima de la actualidad... son los gold-posts

¿Ferguson o Gradi? ¿Quién durará más?

Dedicamos en Brit Corner una semana entera a los 20 años de Ferguson como entrenador y otro artículo a los 23 años de Darío Gradi como técnico del Crewe Alexandra, tres años más que Ferguson. Tentado por la desidia que producen los domingos... uno navega por la red y no deja de encontrar cosas curiosas. Por un lado, vemos que en la prestigiosa casa de apuestas ladbrokes hay un apartado especial dedicado a Ferguson y Gradi. En Inglaterra ya hacen apuestas para ver que entrenador dura más en el cargo. Da más dinero apostar por la marcha de Ferguson antes que la de Gradi y eso que el entrenador del Crewe lleva tres años más en los banquillos de un mismo equipo. La apuesta por la retirada de Gradi se paga a 2.25 mientras que la de Ferguson a 1.56. Hagan juego.... aunque igual no cobran o no pierden el dinero hasta dentro de muchos años, quien sabe...

Otra de las apuestas es saber si Beckham volverá o no a vestir la camiseta de Inglaterra. De momento, ya se creó hace unas semanas la web www.bringbackbeckham.com (como adelantó Bar Deportes) donde cualquiera que quiera que Becks vuelva a los pross puede dejar su voto y ya van casi 13.000. No creemos que McClaren haga mucho caso la verdad.

viernes, noviembre 17, 2006

Vuelta al fútbol a los 44 años

Richard Gough fue uno de los centrales más carismáticos del Glasgow Rangers en la década de los 90 y uno de los defensas más importantes que ha dado la selección escocesa en toda su historia. Consiguió hasta nueve títulos consecutivos con el conjunto de Ibrox Park y acabó su carrera como jugador en el año 2001 llegando a pasar por la Major League Soccer estadounidense.
Digo todo esto porque el bueno de Gough está dispuesto a volver a los terrenos de juego en el modesto Patrick Thistle, equipo de la segunda división escocesa. La noticia no deja de sorprender a propios y extraños teniendo en cuenta que Gough colgó las botas hace cinco años. El entrenador de los jags, Dick Campbell, ha desmentido los rumores pero lo cierto es que el ex internacional escocés está entrenandose con el Patrick y quiere volver a jugar. Gough echa de menos el olor de la hierba y la intensidad de los partidos... aunque bien es cierto que uno debe ser consciente de que su tiempo ha acabado. La nostalgia ya no es lo que era querido Richard...

jueves, noviembre 16, 2006

Estreno de lujo para el nuevo Wembley

Se hace esperar y ya se ha aplazado en numerosas ocasiones, la construcción del nuevo Wembley no deja de ser un quebradero de cabeza para la Federación Inglesa pero al menos ya se está preparando una inauguaración a la altura de la catedral del fútbol o al menos de lo que queda de ella que es más bien poco.

La FA ha dejado entrever que será Alemania la selección a la que se enfrente Inglaterra en lo que será la fiesta del fútbol inglés en 2007. El rival no podía ser otro. Alemania fue la última selección en jugar en el antiguo Wembley, en aquel encuentro (un lluvioso 7 de octubre de 2000) un gol de Dietmar Hamman desde fuera del área dejó un sabor agridulce a los aficionados en la despedida del estadio más querido del país. Junto con el Big Ben, la abadía de Westminster, el Tamesis o el British Museum... Wembley formaba parte de toda guía turística de Londres y fue un palo muy duro que sus puertas se cerrasen con una derrota con sabor a venganza de Alemania.

Alemania volvía a derrotar a Inglaterra en Wembley como lo hizo en la Eurocopa de 1996 poniendo un broche de oro a los duelos con los ingleses. Los pross les ganaron el Mundial del 66 con el polémico gol que todo el mundo recuerda. Desde aquella fase final la intensidad de estos partidos ha ido creciendo y ambos combinados nacionales han protagonizado enfrentamientos fantásticos. El 1-5 de la Inglaterra de Eriksson en 2001 fue la revancha buscada por aquella selección liderada por Beckham, Owen y Gerrard y fue el último partido entre ambos países. Pues bien, esperemos que la Federación Inglesa se ponga en marcha para preparar un estreno del nuevo Wembley que recupere la tradición y los duelos de la vieja catedral. Alemania es el rival perfecto, de eso no cabe dudas.

Toda la información sobre Wembley en www.wembleystadium.com

martes, noviembre 14, 2006

La FA Cup entra en escena


Ya está en marcha. Todo buen aficionado al fútbol espera con ansia el comienzo de la FA Cup. La competición más romántica y más apasionante del mundo para muchos donde cualquier equipo de barrio puede inscribirse y llegar incluso a jugar frente a un grande del país. En esta copa no hay desplantes, no hay cambios de formato cada dos por tres, no hay desgana... por no haber no hay una federación y unos equipos que se toman a broma y a cachondeo las eliminatorias como sucede aquí en España.


En este mes de noviembre en el que nos encontramos, la FA Cup ya va por la 2a Ronda. En estas eliminatorias aún no entran en juego los equipos de la Premier League y de la Championship pero ya podemos encontrar duelos interesantes. Tanto interés tiene la Copa en Inglaterra que la BBC da en directo el sorteo de la 2a Ronda. En otros países y más concretamente en España no se televisa ni el sorteo de las semifinales ni los cuartos ni nada parecido. La culpa la tiene el señor Villar y los equipos grandes que se empeñan en hundir la competición cada año en busca de sus propios intereses.


Esta temporada la segunda ronda tiene como plato estrella la participación del Nottingham Forest. El dos veces campeón de Europa es líder destacado de la league one inglesa (la segunda b española) y parece resurgir de las cenizas aunque aún es pronto para adelantar acontecimientos. El partido del Forest será televisado para todo el país. Su duelo frente a un equipo amateur (el Salisbury City) será retransmitido en horario de máxima audiencia el próximo 3 de diciembre y muchos aficionados preferirán ver este partido a más de uno de la Premier. Así es la FA Cup, un torneo donde la tradición y el respeto están por encima de todo.

lunes, noviembre 13, 2006

El mañana sin Ferguson

Para poner fin a la semana dedicada a Alex Ferguson, Pablo Pinto (redactor de informativos Antena 3 tv y ya toda una referencia en los telediarios más vistos del país) colabora para Brit Corner y reflexiona sobre el futuro del entrenador del Manchester United. Es evidente, que por aquello del ciclo vital, Ferguson no va a ser el manager del Manchester United eternamente. Su final tiene que llegar, y me atrevo a vaticinar que será pronto. Tengo la sensación de que Sir Alex quiere un último dulce que llevarse a la boca, un goloso postre, para cambiar el banquillo de Old Trafford por un asiento de lujo en el palco de honor.

Sir Alex está preparando su adiós. No quería abandonar al United en mitad de tabla, aborrece la idea de dejar al equipo tal y como se lo encontró hace veinte años y algunos días. Es posible que por ese motivo no se haya marchado en estas temporadas de vacas flacas. Lo fácil, para muchos otros, hubiese sido despachar a su plantilla con un "ahí os quedais" y que fuera otro el que plantara cara al 'Dragón de Abramovich'. Su leyenda ya existía. Pero nunca se ha caracterizado Ferguson por rendirse. Y no sólo está luchando contra el Chelsea, sino que a día de hoy le está superando, tanto en la tabla clasificatoria, como en espectáculo por los campos ingleses. Buen legado, Alex.

La plantilla que está construyendo será competitiva en un futuro con o sin él. Rooney, Cristiano Ronaldo, Carrick, y en menor medida Fletcher, Vidic y ¡¡Ojo en unos años a Piqué!!. Unidos a jugadores con más edad, sin llegar a ser veteranos, como Ferdinand, Saha o Heinze, el futuro está asegurado... Si Don Malcom Glazer lo consiente. La duda, la grandísima duda, que surgue tras la inevitable marcha de Ferguson será adivinar quién será su sucesor. Aunque en las últimas épocas de crisis los nombres que salían eran del perfil de Capello o Lippi, apuesto porque se tratará por un hombre de perfil bajo. Al estilo McLaren con la selección nacional, esperemos que con mejor suerte, tras la marcha de Eriksson.
Sea como fuere, Ferguson acabará inmortalizado en los alrededores de Old Trafford junto a la estatua de Matt Busby donde todo buen aficionado del United deberá de peregrinación para rendir al que es ya el más grande de todos los tiempos en el teatro de los sueños.

domingo, noviembre 12, 2006

Capítulo 7: Stam, Beckham, "su retirada" y el dominio del Chelsea

Martí Perarnau.- (ver Perarnau blog, colabora para Brit Corner y nos analiza el último capítulo de la semana dedicada a Alex Ferguson: "Stam, Beckham, su "retirada" y el dominio del Chelsea) Hace más de mil partidos que este hombre se sienta en el mismo banquillo, así que poca broma. Ha subido las más altas montañas y también se ha despeñado por barrancos profundos, como hace un año, cuando no pudo superar la liguilla de la Champions ni siquiera para entrar en la Uefa. Las ha visto de todos los colores, con lo que la marcha de Stam primero y Beckham después apenas debió suponerle un leve escozor en los hombros, un ligero interrogante sobre el futuro, la certeza de que un proyecto terminaba y había que levantar otro.

Aquél gran Manchester del triplete del 99 perdió mucho con la partida de dos de sus puntales, pero ellos perdieron más. Como en tantos proyectos que Ferguson ha erigido en estos veinte años, aquél equipo estaba condenado a licuarse en el tiempo pues ya sabemos que no hay nada más frágil y breve que el equilibrio de un equipo campeón. Aquellos hombres lo ganaron todo, incluidas tres ligas consecutivas, y a varios le cambió el hambre y las ganas de comer. Hubo quien prefirió la pasta italiana y también quien eligió instalarse en la galaxia. Al poco llegó Abramovich para quedarse en el Chelsea y a Ferguson se le hizo cuesta arriba otra vez, con la inestimable ayuda del cascarrabias Keane, el multimillonario Glazer y el brillante Mourinho.

Más les valdría a Stam y Beckham haberse quedado en Manchester, donde el viejo Ferguson aún les haría un hueco en su nuevo (¿cuántos lleva?) proyecto ganador. Como escribió Monterroso, cuando despertó, Ferguson todavía estaba allí.

sábado, noviembre 11, 2006

Capítulo 6: El triplete (1999)

Javier Trinidad (redactor de Antena 3 colabora para brit corner y nos analiza el capítulo 6, penúltima entrega: El triplete). Tengo grabada una imagen del año 99 a fuego, como muchos aficionados a este deporte del balón. Ole Gunnar Solskjaer, el asesino con cara de niño, entraba en éxtasis tras perforar la meta de Oliver Kahn en el Camp Nou.. Era el gol que significaba la segunda Copa de Europa en la historia del Manchester, la coronación de Sir Alex Ferguson a los mandos del United, la cúspide de los Fergie’boys, el mejor final para la temporada más gloriosa de los Diablos Rojos. Esa campaña, el equipo de Ferguson fue imbatible, se llevó la triple corona. A la ya mencionada Copa de Europa conseguida ante el Bayern de Munich, se sumaban la Premier y la Copa. Un éxito casi obsceno por su grandeza.

En el campeonato de la regularidad, el Manchester se llevó el título por tan solo un punto. El Arsenal de Wenger acechó hasta el último momento en un duelo antológico, el preludio de lo que poco después se vería en Highbury. Pero ese año el Manchester tenía una de las mejores plantillas de su historia, sino la mejor. El gran danés, Peter Schmeichel, en la portería: reflejos y colocación; los Neville, Stam, Johnsen e Irwin en la zaga: seguridad, fuerza, colocación, veteranía; Becks, Keano, Scholes y Giggs en la media: toque, presencia, clase, vértigo; Cole y Yorke en la vanguardia: gol y velocidad. Semejante equipo tenía Ferguson y así le fue.

Este equipo de leyenda se difuminó con el paso de los años, como todo en esta vida. De aquella plantilla aguantan, siete años después, el omnipresente Ferguson, Scholes, Giggs, Neville, Solskjaer y Brown. El referente de aquel equipo, Beckham, calienta banquillo en el Bernabéu y ha perdido el sitio en la Selección.

Ferguson sobrevive a todas las leyendas que pasan por el vestuario de Old Trafford. Robson, Hughes, Cantoná, Becks, Keane….20 años en un banquillo no son tantos, debe pensar el bueno de Sir Alex Ferguson. Seguro que ya piensa en el homenaje a Rooney. Con él dirigiendo al United, of course.

viernes, noviembre 10, 2006

Capítulo 5: Los fergie babes

Enrique Laméyer (redactor de Diarios de Fútbol, colabora para Brit Corner y nos analiza el Capítulo 5).- Cantona, Schmeichel, Kanchelskis, Keane… Alex Ferguson siempre demostró tener un “sexto sentido” a la hora de descubrir talentos fuera de Old Trafford. Sin embargo, si hubo una hornada de jóvenes talentos que destacaron en el Manchester United bajo el ala protectora del técnico escocés, esa fue la de los “Fergie Babes” (llamada así en recuerdo a la generación de los Bobby Charlton, George Best o Duncan Edwards, y entrenada por el legendario Matt Busby, que recibió el nombre de los “Busby Babes”). Los integrantes de este grupo fueron los hermanos Neville, Gary y Phil, Nicky Butt, Paul Scholes, Ryan Giggs y el más emblemático de todos, David Beckham, todos ellos internacionales con la selección de los “tres leones”, salvo Giggs que, aunque tuvo la opción de ser convocado por Inglaterra (donde se crió futbolísticamente), eligió representar al combinado de Gales ya que, al igual que sus padres, es donde él nació.

Fue precisamente el extremo de Cardiff el primero de su “quinta” en debutar en la primera división inglesa (que aún no era conocida como Premier League). Tras ser incorporado a las filas de los red devils por Sir Alex a la edad de catorce años (proveniente de los juveniles de sus vecinos del City), Ryan Giggs debutó en la máxima categoría en la segunda vuelta de la temporada 1990/91 cuando únicamente contaba con 17 años y 3 meses. Desde su debut en 1991 hasta hoy en día, el veloz extremo ha disputado unos 680 encuentros con la camiseta roja en los que ha anotado más de 130 goles. Es, a día de hoy, el tercer jugador que más encuentros ha disputado con la camiseta de los “diablos”; y esta temporada, con toda seguridad, pasará a ser el segundo (está a solo ocho partidos del legendario Bill Foulkes), solo por detrás de un mito como Bobby Charlton. Sin duda, el mejor jugador de los “Fergie Babes”.

Porque si el mejor ha sido Giggs, para hablar del más mediático tenemos que dirigir nuestras miradas a David Beckham, prototipo del fútbol moderno y máximo exponente de la publicidad. Pero no debemos olvidar que, antes de que los flashes de las cámaras invadieran su vida, Beckham fue considerado uno de los mejores jugadores de banda de Europa. Ferguson fue quien más jugo pudo sacarle al de Leytonstone (Londres). No obstante, el escocés se vio obligado, ante la progresión del interior inglés, a sentar en el banquillo (y posteriormente a traspasar) a todo un Andrei Kanchelskis. Sin una gran velocidad ni un talento regateador destacable, Sir Alex sí vio en sus precisos centros y sus mortales lanzamientos de falta el arma perfecta para su Manchester United. Sin ir más lejos, dos corners botados por Becks le dieron al Manchester su segunda Copa de Europa en 1999. Tras ocho años como integrante de la primera plantilla de los “diablos rojos”, el inglés fue traspasado al Real Madrid (tras un enfrentamiento con su técnico). Un Balón de Plata y un segundo puesto en el FIFA World Placer, ambos en 1999 evidencian que, al menos durante un tiempo, Beckham fue uno de los mejores de Europa. Ferguson como con muchos otros, fue el primero en verlo.

Y con Paul Scholes, Alex Ferguson completaría su triángulo ofensivo en el centro del campo. El pelirrojo debutó en la temporada 1994/95, jugando la nada desdeñable cifra de 17 encuentros en los que anotó 5 goles. Centrocampista total con calidad para mover el balón, con buen lanzamiento, excelente remate de cabeza (a pesar de su baja estatura), gran llegador, trabajador incansable… Scholes es posiblemente el futbolista más completo que ha jugado en Inglaterra en los últimos veinte años, superior a estrellas actuales como Gerrard o Lampard. Un jugador que, como Giggs, vive en la actualidad una segunda juventud tras superar unos problemas de visión que a punto han estado de retirarle. Todo un lujo para Old Trafford, fruto, como no, de la “factoría Ferguson”.

El éxito de los “Fergie Babes” fue casi inmediato. En la primera temporada en que estos tres jugadores (los más destacados) más los laterales Gary y Phil Neville y el centrocampista Nicky Butt gozaron de la confianza plena del escocés, la 1995/96, los “red devils” se alzaron con el título de liga (en las dos anteriores, los de la 1992/92 y 1993/94, solo Giggs era titular). Desde entonces y hasta que el primero de ellos, David Beckham, abandonó Old Trafford, los de Sir Alex Ferguson se hicieron con siete ligas, tres FA Cup y una Copa de Europa. Siempre con sus jóvenes talentos como base del equipo. Una base sólida, construida desde la cantera. Los “Busby Babes” han tenido, no cabe duda, unos dignos sucesores.

jueves, noviembre 09, 2006

Capítulo 4: La figura de Eric Cantona

¡¡¡Oh Ah Eric Cantona, Oh Ah Eric Cantona!!! Fue sin duda el cántico más escuchado en las gradas de la Premier League en la década de los 90. A la figura de Eric Cantona le debe mucho Alex Ferguson, fue durante cinco años el emblema, el símbolo, el hombre decisivo, la pieza clave, el buque insignia y la bandera del equipo. Sin él la historia de Ferguson en el United no hubiese sido tan gloriosa.
Ferguson una vez más tuvo un sexto sentido a la hora de fichar. Antes de llegar al United, Cantona había militado en numerosos clubes franceses y parecía que su carrera iba cuesta abajo. Estuvo unas semanas probando para el Sheffield Wednesday pero los técnicos del conjunto de Hillsborough decidieron no hacerse con los servicios del francés. Craso error. No tuvieron la visión de Ferguson. Cantona llegó al Leeds United en 1992 y su vida futbolística empezó a cambiar. Ganó el título de liga en su primera campaña completa y Ferguson se lo llevó a Old Trafford en noviembre de 1992.
Muchos en esos días criticaron al entrenador del United por este traspaso. Se decía que Mark Hughes y Eric Cantona no podían jugar juntos. Los números dieron la razón a Ferguson y Cantona y Hughes formaron una de las parejas más letales de la Premier. Fergie convenció a los escépticos que acusaban al francés de irregularidad y poca competitividad. Cantona se convirtió en unos pocos meses en el ídolo de la afición, cada vez que tocaba un balón la grada vivía un orgasmo de sensaciones. Era pura magia, pura fantasía. Para muchos, junto a George Best, lo mejor que se ha visto en el teatro de los sueños.
A Ferguson no le gustaba el lado oscuro del carácter de Cantona que le llevó a perderse numerosos partidos por su violencia en el terreno de juego. Aún así, se convirtió en el jugador más decisivo que ha pasado por la Premier, capaz de ganar el sólo los partidos, un superclase. Un genio que llegaba a los entrenamientos en una Harley Davidson. Ferguson lo recuperó para el fútbol y supo moldear su carácter y hacerle el capitán del equipo. Heredó el 7 de Bryan Robson y su retirada en 1997 es sin duda la fecha más dolorosa en la trayectoria de Sir Alex. Muchos aficionados añoran hoy los tiempos de Cantona, por ello le siguen en sus partidos de fútbol playa y en las salas de cine, el por qué es muy sencillo... Eric Cantona nunca se irá del recuerdo de la grada de Old Trafford.

martes, noviembre 07, 2006

Capítulo 3: El doblete y el adiós de Robson


No. No fue un espejismo. Este equipo iba en serio, la liga del United de Ferguson en 1993 significaba el comienzo de un etapa plagada de éxitos. Un ciclo que tenía su rotunda confirmación en el año 1994. Inglaterra se quedaba fuera del Mundial de Estados Unidos y el Barça de Cruyff caía con estrépito ante el Milan de Capello en la final de la Champions en Atenas. En las islas, un hombre llamado Alex Ferguson entraba en el selecto club de entrenadores capaces de ganar un doblete en Inglaterra (Liga y FA Cup). Sólo siete han sido capaces de hacerlo en más de un siglo de las dos competiciones. Ese honor lo poseen entrenadores como Kenny Dalglish o Arsene Wenger.

A ese hecho no contribuyó de manera decisiva el gran Bryan Robson. El que fuera uno de los mejores centrocampistas del continente en la década de los 80, gastaba sus últimos minutos como futbolista en un United totalmente renovado. Fue de los pocos jugadores que dieron la talla en los primeros años de Ferguson y su contribución en las primeras temporadas fue clave para que otros en el futuro construyesen un equipo de leyenda. Era la prolongación de Ferguson en el campo. El capitán maravilla rindió al máximo hasta el año 92 y él y Steve Bruce alternaron la capitanía hasta que Robson decidió colgar las botas en la 93-94, el año del doblete, era el adiós de uno de los símbolos de la primera etapa de Ferguson.

Bryan Robson, Steve Bruce y Eric Cantona fueron los líderes que eligió Ferguson. El capitán Robson resistió ante la llegada de Kanchelskis, Webb o Paul Ince. Sin embargo, Sir Alex decidió fichar a Roy Keane en el verano de 1993 en uno de los traspasos más sonados de la década. Robson dejó paso a los jóvenes y Ferguson encontraba perfectos sustitutos con una visión de privilegiado. Con jugadores como Ince y Keane el equipo ganó en poderío físico y la máquina de Fergie llegó a su máximo nivel ganando el doblete con absoluta superioridad.

En la final de la FA Cup vencieron por 4 a 0 al Chelsea en Wembley. Ferguson se ganaba ya por aquel entonces el apelativo de heredero de Matt Busby y ya era considerado como uno de los técnicos más grandes de la historia del fútbol inglés. El siguiente reto del técnico escocés sería llevar al equipo al éxito en Europa. El primer año en la Champions fue desastroso. El equipo no llegó a la liguilla de Cuartos de Final después de caer en una eliminatoria marcada por la violencia ante el Galatasaray. Muchos dudaban de la capacidad de Ferguson para hacer rendir al equipo en Europa. Después de la Recopa el equipo acumuló numerosos fracasos y Ferguson no paró hasta conseguir la ansiada Copa de Europa.

Capítulo 2: Título de liga 26 años después

La temporada 92-93 marcó una antes y un después en la vida de Alex Ferguson. El equipo ya había calmado a la afición gracias a la Copa y a la Recopa de los años precedentes pero el número de años sin ganar el título de liga seguía aumentado. Algo parecido a lo que le está sucediendo a Benítez en el Liverpool, al que los títulos no ligeros ( la Champions sin ir más lejos) no le libran de la ansiedad de un grande que no gana la liga desde hace 26 años... curiosamente los mismos que estuvo el United hasta que en el año 93 se alzó con el título de liga.

Era la primera Premier League de la historia. Una auténtica revolución en todos los aspectos. El nuevo estilo de Ferguson por fin se imponía en la liga y eso que de nuevo fue cuestionado en el comienzo de la temporada. La campaña anterior, el United volvió a rozar el título pero una vez más se quedó a las puertas. El Leeds ganó la última Liga inglesa como tal. Llegó la modernidad con el nombre de Premier League y sin duda con el nombre de Manchester United y Alex Ferguson. No sólo en fútbol sino también en organización de club.

Ferguson ya tenía en su plantilla a los carismáticos Peter Schmeichel, Dennis Irwin, Paul Ince, Ryan Giggs o Lee Sharpe. En noviembre de 1992, en plena resaca de la Barcelona olímpica, el United era décimo y parecía que el crédito de Ferguson se acababa. Sin embargo, al genio escocés se le ocurrió la genial idea, la más acertada de su carrera, la de fichar a Eric Cantona procedente del actual campeón en aquellos tiempos, el Leeds United. El Manchester encontró en la inspiración del francés el ingrediente perfecto para ganar la liga (en el capítulo 4... La figura de Eric Cantona).

El United ganó con un estilo ultra ofensivo y un juego de bandas donde Andrei Kanchelskis, Lee Sharpe y Ryan Giggs nurtían de balones a Cantona, Hughes y McClair. Era el comienzo de un ciclo de oro bajo el mandato de Ferguson. Old Trafford no veía a un United como campeón de liga desde el año 67... La otra gran época de los red devils. Los Best, Charlton, Kidd y compañía (los chicos de Busby) ya tenían herederos y Busby el suyo, Alex Ferguson.

lunes, noviembre 06, 2006

Capítulo 1: La era post Atkinson y la Recopa


Para empezar a analizar los 20 años de Ferguson en el banquillo del Manchester United hay que citar dos acontecimientos que marcaron sin lugar a dudas sus inicios como entrenador de los red devils. La FA Cup de 1990 y la Recopa de 1991. Ambos títulos supusieron el comienzo de la gran época del United. Sin embargo, los primeros años de Fergie en el banquillo de Old Trafford no fueron nada fáciles.


Ferguson llegaba a un club instalado en una profunda depresión. Ron Atkinson había sido destituido en noviembre y se buscaba un revulsivo para levantar a un histórico en crisis. El United, en el año 86 llevaba ya 19 años sin conseguir ganar la liga e incluso pasó algún tiempo en segunda división en los años 70. Ferguson llegaba a Old Trafford después de dirigir a la selección escocesa en el Mundial de México. Había muchas esperanzas puestas en él aunque casi nadie creía que sería lo que luego fue.

En el verano de 1987, Ferguson tuvo la primera oportunidad para hacer un equipo a su imagen y semejanza y fichó a Viv Anderson, Steve Bruce y Jim Leighton. En la anterior temporada, Ferguson supo que era un año de transición y el equipo acabó en la mitad de la tabla. La 87-88 fue su primer gran examen del que no salió mal ya que el equipo acabó segundo. De todas formas, la urgencia histórica seguía ahí y la presión era cada vez mayor.

Al mismo tiempo que el gran Liverpool de los 80 seguía arrasando, en la 88-89 volvía Mark Hughes para unirse al barco de Ferguson. Una temporada de la que se esperaba mucho pero que el equipo dio poco. El talento de Bryan Robson, los goles de Hughes y la experiencia de Paul McGrath no fueron suficientes y Ferguson veía como su proyecto se tambaleaba. El equipo acabó séptimo y eliminado en los Cuartos de Final de la FA Cup.

Esos primeros años de Ferguson fueron muy parecidos a los de Cruyff con el Barça. Dos entrenadores en la cuerda floja que fueron salvados por momentos puntuales para luego construir equipos de ensueño. La directiva del United aguantó la presión de prensa y afición y Ferguson seguía como técnico en la 89-90. En la liga las cosas seguían sin salir pero la FA Cup, el torneo de los torneos, fue el oasis en el desierto.

En la 3a ronda de la Copa de ese año, a Ferguson ya se le daba por despedido si perdía una eliminatoria contra del Nottingham Forest. El equipo ganó con un gol del joven
Mark Robins: "Ferguson siempre apostaba por los más jóvenes y siempre tenía tiempo para ti, con eso todo esta dicho". El United acabó ganando esa FA Cup y salvó no sólo la temporada sino la carrera de Ferguson que demostró en la final el carácter que le hizo ser siempre un ganador.


La FA Cup de 1990 se resolvió en un replay en Wembley antel el Crystal Palace. Empate a 3 en el primer encuentro y Ferguson tomó una decisión más que d
iscutida en su día. Quitó al intocable Jim Leighton de la portería y puso al discreto Gary Walsh y el equipo ganó. Eran los primeros signos del atrevimiento de Ferguson. Siempre con decisiones polémicas y de riesgo que casi siempre el futuro le ha dado la razón.

Al año siguiente, el United ganó la Recopa al Barça de Cruyff. Al mismo Barça que empezaba a ser un dream team. El equipo también respondía en Europa y Bryan Robson, Mark Hughes, Steve Bruce o Brian McClair eran la base de un equipo joven y sobre todo revolucionario. Se abandonó el típico juego inglés de pelotazo y Ferguson empezaba a revolucionar el juego en las islas, balón al suelo pero directo y ofensivo manteniendo la esencia británica. Ferguson ya tenía a su particular dream team...

jueves, noviembre 02, 2006

Inglaterra apostará por el Mundial de 2018

Quedan 12 años todavía para la disputa del Mundial de 2018 pero en Inglaterra ya están pensando en apostar fuerte para hacerse con la organización de la fase final de 2018. En los medios ingleses es casi un secreto a voces y tras el fracaso para hacerse con la organización del Mundial de 2006, la FA y el Gobierno británico van a hacer todo lo posible que su país acoja el torneo en 2018.
La federación inglesa no apostará por el Mundial de 2014 ya que la FIFA tiene bastante decidido que la organización de la fase final de ese año sea en el continente americano, seguramente en Brasil. La FIFA apostó por África en 2010 y lo hará por Sudamérica en 2014. El ministro de deportes inglés, Richard Caborn, aseguraba ayer a la BBC que el que será (si todo va según lo previsto) nuevo Primer Ministro, Gordon Brown, está muy interesado en que Inglaterra organice el Mundial. El Gobierno y la FA echarán el resto para que los inventores del fútbol organicen el mejor torneo de selecciones del mundo. Ya ha habido reuniones entre UEFA y FA y comienza así un largo camino para ver de nuevo una final en Wembley.