El héroe silencioso guía al United hacia Moscú

Que el United saliese como salió en el Camp Nou entraba dentro de algunos pronósticos pero su imagen ante el Barça ha sido más de un equipo de la vieja escuela italiana que otra cosa. Ferguson y su Manchester han visto como en otros tiempos los riesgos en las semifinales le jugaron una mala pasada ante Leverkusen, Borussia o Milan. Esa experiencia le ha hecho pensar a Fergie que quizás, a veces, es necesario sacrificar el fútbol para pasar aunque repetimos lo de el partido de ida, eso es de equipo menor y este United ha demostrado esta temporada que puede hacer mucho más. Defensivamente ni una pega. Después de 21 años como entrenador, el United de Ferguson siempre se ha caracterizado por ser un equipo fuerte arriba pero débil atrás. Cuando llegaba un choque europeo, el Manchester siempre lo pasaba mal en defensa, incluso en el año del triplete al que le salvó un centro del campo y un ataque increíbles.

Su `yo´ Benítez

Las cosas han cambiado. Ferguson ha sabido sacar su yo de Benítez que pensábamos que no tenía y que esperemos que no desarrolle demasiado porque otro United es posible. El invento de Hargreaves ha sido una gran idea y ha mejorado a Gary Neville e incluso a Wes Brown que ha rendido mejor de lo esperado en defensa. Ferdinand correcto y Evrá crecido en un lateral que ha sido suyo. En el centro del campo, Paul Scholes merece mención especial. No sólo por su gol sino por su trayectoria que merece un artículo aparte. Siempre es el héroe silencioso del Manchester de Ferguson, lo hace todo bien y aparentemente fácil. Scholes se perdió la final de 1999 por sanción y en Moscú tendrá la oportunidad de jugar su primera final europea después de una impecable carrera. Carrick hizo el trabajo sucio mientras que Park se quedó una vez más en aprobado raspado. El sacrificio de Tévez también ha sido de elogiar mientras que Cristiano se ha quedado otra vez lejos de demostrar que es el mejor en el momento en el que hay que demostrarlo. Urge que no se lo crea tanto o volverá a ser el tipo individualista que llegó de Lisboa. El Barça ha sido mejor en el global de la eliminatoria pero el Manchester ha conseguido que no metiesen casi ni miedo. En Moscú, Ferguson nos volverá a sorprender aunque esperemos que sea con algo más atrevido que lo visto ante el Barça.

Lo de esta noche es puro teatro

A continuación Brit Corner hace un juego con la Real Academia de la lengua Española y compara las numerosas definiciones de teatro que nos da nuestro idioma con el partido Manchester United-Barcelona que se juega en el Teatro de los Sueños. En cursiva aparecen las definiciones de la RAE.

1. Edificio o sitio destinado a la representación de obras dramáticas o a otros espectáculos públicos propios de la escena. Old Trafford y lo de drama sería más para el Barça si pierde ya que se acabaría un ciclo, el de Rijkaard. El United vería también como un auténtico drama lo de caer otra vez a las puertas de la final y después de haber completado una gran temporada que no lo será tanto si el equipo pierde ante el Barcelona.


2. Sitio o lugar en que se realiza una acción ante espectadores o participantes. Bien sabe el United que no puede fallar a su público. En Old Trafford no pierden desde hace tres años en Europa aunque esta campaña ha ganado su rival de toda la vida en liga, el City, también el Portsmouth en Copa y el Coventry en la Carling Cup….
3. Escenario o escena. En este escenario nunca ha ganado el Barça en las tres veces que ha jugado en competición europea. Una victoria para el United (3 a 0 en la Recopa del 84 con un gran Bryan Robson) y dos empates (2 a 2 en la 94-95 y 3 a 3 en el año del triplete). Una escena se puede montar en el vestuario del equipo que pierda
   
4. Lugar en que ocurren acontecimientos notables y dignos de atención. Italia fue el teatro de aquella guerra. Esta semifinal es un acontecimiento notable y seguro que un espectáculo sobresaliente. El Barça busca su sexta final de Champions mientras que el United va a por la tercera. Moscú será el teatro de la guerra definitiva aunque para llegar ahí hay que ganar esta batalla.
5. Conjunto de todas las producciones dramáticas de un pueblo, de una época o de un autor. El teatro griego. El teatro del siglo xvii. El teatro de Calderón. El pueblo inglés recuerda a Old Trafford con mucho cariño ya que fue ahí donde Beckham marcó ante Grecia en la fase de clasificación para el Mundial de 2002 y le dio la clasificación en el descuento. Gol de época, gol de autor. En la 98-99, Beckham le metió un golazo de falta a Ruud Hesp que aún recuerda Van Gaal en un espectacular 3 a 3 con el Manchester ¡¡de blanco!
6. Literatura dramática. Lope de Rueda fue uno de los fundadores del teatro en España. La generación perdida en el accidente de Munich en el 58 fue la inspiración del nombre de Teatro de los Sueños para Old Trafford. Ellos fueron los fundadores del mito del United y responsables del inicio de la leyenda de este club.
7. Arte de componer obras dramáticas, o de representarlas. Este escritor y ese actor conocen mucho teatro. Sin Ronaldinho se pierde a un gran actor, capaz de fingir lesiones y más extravagancias
8. Acción fingida y exagerada. Arturo le echa mucho teatro a sus intervenciones. Lo de fingir y exagerar está muy mal visto en los campos británicos aunque Cristiano se empeña en llevar la contraria
9. Práctica en el arte de representar comedias. Ese actor tiene mucho teatro. Para comedia la de Barthez ante el Deportivo en aquella victoria histórica de los gallegos en Old Trafford. Al francés que ni se le ocurra aparecer en el estadio que igual van a por él.

Recta final

United, Chelsea y Liverpool se enfrentan a sus días decisivos para catalogar una temporada llena de aspectos interesantes. A estas alturas, el Arsenal ya ha finiquitado su campaña con buena nota a pesar del adiós europeo y la mala racha final en la Premier. El Manchester United es el equipo que más dudas ha generado después de perder ante el Chelsea en Stamford Bridge y empatar en el Camp Nou dando una pobre imagen. Sin embargo, Ferguson ha reservado casi por primera vez en la temporada a sus estrellas consciente de que todavía dependen de sí mismos. Está la final de Champions a tiro con el partido de vuelta en Old Trafford y la Premier con el West Ham en casa y el Wigan fuera en la última jornada. Ahora, el duelo frente al Barça es la fecha clave para saber si este United está a la altura del de aquel del triplete o es como el del año pasado que se hunde en Europa cuando llega el momento crucial. Toda la responsabilidad debe recaer en Cristiano que ya falló el año pasado en San Siro y ahora Ferguson sabe que él es el hombre y por eso lo dejó en el banquillo ante el Chelsea.

La hora de la verdad

Precisamente el equipo de Avran Grant ha llegado a tronpicones a este final de la Liga, sin hacer ruido pero ahí están. Si siguen estando tan fuertes en Stamford Bridge, el Liverpool no podrá sacar la eliminatoria adelante aunque, una vez más, Benítez ha tenido la oportunidad de dar descanso a varias de las piezas clave para la Champions mientras que el Chelsea ha tenido ante el United un partido durísimo a pocos días de la semifinal europea. Es de elogiar el impresionante récord de los blues en casa, algo que, a estas alturas con un calendario tan lleno de partidos es muy difícil de mantener. El Liverpool afronta esta semana otro de sus partidos del año, tiene como seis o siete en toda la competición europea y casi siempre los saca adelante. Equipo mejor preparado, mentalizado y organizado para las finales no hay. Cuando termine el partido de Londres, el Liverpool puede cerrar una temporada muy discreta si pierde u otra de engañoso éxito si gana. No hay tiempo para más análisis, ahora les toca los equipos demostrar lo que valen.

Sin noticias del United

Partido extraño el que hemos vivido en el Camp Nou. El United ha salido al campo como un equipo menor, a años luz de su mejor versión. Ferguson ha planteado un once pensando en el rival y eso no es de gran equipo, es de un conjunto que se cree inferior y sobre todo que ha traicionado a la filosofía que tan buenos resultados le ha dado esta temporada. Para empezar, Hargreaves ha salido de lateral pensando que Messi o algún otro desbordaría a Brown si éste hubiese jugado de lateral. El resultado ha sido que Messi, Deco y Zambrotta acabasen por jugar por el lado de Evra con un United metido tan atrás que Van der Sar parecía uno más de los centrales. En el centro del campo, Carrick correcto y Scholes sensacional, de lo poco bueno del United hoy. Rooney en la derecha rinde al 50 por ciento y si el equipo está tan retrasado, peor aún. Eran buena idea la de meter a Park para correr por la banda pero no le ha llegado ni un balón, le ha venido grande el choque.

El Cristiano de antes
En cuanto a Tévez, el hombre ha estado más perdido que nadie. Ha hecho de enganche con Cristiano que ha pecado de ese jugador individualista y nervioso que parecía que se había quitado de encima. Ronaldo ha estado muy sólo arriba pero cada vez que cogía el balón sólo miraba por su interés como en los viejos tiempos. Preocupa que el portugués repita con una actuación similar a la de la semifinal de San Siro el año pasado aunque hay que decir que este United es mucho más serio. La organización defensiva ha sido excelente pero igual que se le pide al Liverpool y al Chelsea más, al Manchester igual y hoy ha decepcionado. Los pelotazos de Van der Sar han sido tantos que el United recordaba más a un equipo que viene a jugarse el descenso que a otra cosa. Aún así, la jugada le ha salido perfecta a Ferguson aunque la imagen de superequipo con la que llegaba ha quedado en entredicho. En Old Trafford se espera que Ferguson ponga a todos en su sitio y que cada uno juegue donde debe, así será.

La 2 dará el Chelsea-United...

Atención, noticia. José Manuel Díaz, narrador de la Premier League ha anunciado en su blog que la televisión pública va a dar el Chelsea-Manchester United por la 2 y en directo a la 13.45. No hay más texto en el blog del narrador de la Premier, su comunicado es claro, contundente aunque no es fiable. Esperemos que se mantenga todo con normalidad porque como pase otra cosa se va a liar. Díaz no ha querido dejar ningún mensaje más en su ya famoso blog de la Premier así que ahora a esperar y a disfrutar del partido como deberíamos haberlo hecho de otros que fueron en diferido o ni siquiera se emitieron por múltiples razones.

Cuestión de detalles

La historia de los Liverpool-Chelsea en Europa siempre se ha caracterizado por la tensión antes, durante y después de los partidos. El escaso fútbol que se ha visto en las eliminatorias se contrarresta con la emoción y la garra que le ponen ambos equipos en un choque en el que los londinenses llegan con ansias de revancha. El Liverpool no podrá resolver la eliminatoria en la vuelta en casa y tendrá que salir más al ataque de lo normal en Anfield. Steven Gerrard es tan importante que si hoy no está al cien por cien su equipo se resentirá. Lleva toda la semana con problemas en la espalda pero jugará esta noche aunque sea con muletas. Benítez ya se ha encargado de calentar el ambiente, un clásico de estos partidos. Ha dicho que en el Chelsea sólo han cambiado las ruedas de prensa y la verdad es que razón no le falta.

El Liverpool llega mejor

El Chelsea, con mejor plantilla y presupuesto que el Liverpool, llega a este partido en peor momento y ofreciendo una pobre pero efectiva imagen. Ninguno de los dos clubes garantiza fútbol pero es una semifinal, son equipos ingleses y el escenario es perfecto. Las claves estarán en lo de siempre. Este será el partido de los detalles porque si todo va según lo previsto no sólo el partido sino la eliminatoria puede decidirse por un sólo gol. Un gol puede dar la eliminatoria, una expulsión, un fuera de juego no señalado, un penalti. Es un duelo tan igualado que cualquier aspecto del encuentro va a ser importante. El favorito es el equipo de Benítez no sólo porque está en su competición sino porque llega más descansado y en mejor forma. Ya no está Mourinho que daba más juego a la prensa, una pena.

El United y el Camp Nou

Los Manchester-Barça siempre se han caracterizado por el espectáculo. El United regresará este miércoles al estadio donde logró su segunda Copa de Europa en el mágico año del triplete (1999). Casi nueve años después, las cosas han cambiado mucho en el Barça pero no tanto en los ingleses que mantienen a Ryan Giggs Paul Scholes y Wes Brown entre los titulares y a Sir Alex Ferguson en el banquillo. Precisamente, desde esa temporada no se han vuelto a ver las caras azulgranas y red devils. El Manchester llega como favorito al Camp Nou, algo impesable no hace mucho. Los seguidores del United todavía recuerdan la goleada del Barça de Cruyff en la temporada 94-95. El Barça y el United se cruzaban en la liguilla en una temporada en la que el dream team empezaba a sufrir después de caer ante el Milan en la final de la Champions de 1994 y ver como aparecía el Madrid de Valdano en la temporada siguiente.

La noche del cambio
Sin embargo, una de las últimas grandes noches del dream team fue en el Camp Nou y ante el Manchester United. Ferguson y su equipo triunfaban en Inglaterra y eran uno de los equipos de moda del viejo continente. A pesar de esa fama, el Manchester decepcionaba en la Copa de Europa cada vez que salía de Old Trafford y ante el Barça se demostró que ambos equipos estaban a años luz en lo futbolístico. El Barça ganó 4 a 0 aunque en favor del Manchester hay que decir que no pudo contar con Cantona ni Schmeichel, los dos mejores jugadores de aquel equipo. A Ferguson, en aquellos tiempos se le notaba que tenía mucho miedo cuando jugaban en Europa. De esa noche aprendió mucho el Manchester y sobre todo su entrenador. Ahora, todo ha cambiado. El Manchester regresó al Camp Nou en el 99 con un 3 a 3 que supo a poco ya que el United de Yorke, Cole, Beckham y compañía fue muy superior. Barcelona puede asistir este miércoles al definitivo declive del Barça unido al crecimiento del que puede ser el nuevo rey de Europa. Mejor escenario imposible para el United si quiere demostrar al mundo que es el mejor del planeta.

Artículo Brit Corner de interés: El triplete

TVE maltrata al espectador

Este sábado Televisión Española ha vuelto a jugar al despiste con la retransmisión de la Premier League. José Manuel Díaz anunciaba ayer en su blog que el partido entre Blackburn y Manchester United no iba a ser emitido por unos problemas con los derechos del balonmano. Una vez más, a última hora se cambia la parrilla y casi sin avisar, con nocturnidad y alevosía como diría alguno. No vamos a entrar en analizar si no han podido hacer otra cosa pero queda claro que esta es una nueva falta de previsión que nos conduce a ver otro partido del Liverpool, en este caso ante el Fulham. El partido de la jornada era sin duda el de Ewood Park pero está visto que no dan una. Televisión Española sabe desde hace ya tiempo, o debería saber, que el United es el rival del Barça en la Champions la semana que viene, que es el equipo que mejor juega en la actualidad y que el espectador ya ha visto demasiados partidos del Liverpool por muchos españoles que haya.

¿Qué pasará con el Chelsea-Manchester United?
El fútbol inglés vuelve a sufrir en Televisión Española. La culpa no creemos que sea la de José Manuel Díaz que imaginamos estará más cansado que nosotros de todas estas cosas. La Premier es la liga más vista del mundo pero aquí la televisión pública no la está tratando como tal. El próximo 26 de abril, el Chelsea y el Manchester se juegan la liga en Stamford Bridge en el partido del año ya que el equipo de Ferguson podría dar carpetazo definitivo al título. No sabemos si lo veremos, si lo veremos codificado, si lo veremos en diferido, si lo veremos sin sonido, si lo veremos en blanco y negro, si nos pondrán un programa infantil, si veremos verano azul o algo parecido o si lo veremos a las diez de la noche. En fin, sólo nos quedan los blogs para expresar nuestro descontento y quedarnos sin ver lo más interesante del fin de semana.

Tengo una pregunta para Fabio

Hemos visto a Luis Aragonés en Televisión Española contestando a las preguntas de los aficionados . ¿Se imaginan a Fabio Capello respondiendo en la BBC a las cuestiones de los aficionados ingleses? Su dificultad con el inglés de momento lo impediría pero tendría su gracia. Vamos en Brit Corner a lanzarle algunas preguntas a Capello, las que serían las más interesantes y también las más curiosas...

¿Seguirá llamando a Beckham?
¿Quién será el portero titular?
¿Jugará Rooney sólo arriba?
¿Estarán juntos en el once Lampard y Gerrard?
¿Cuando se lanzará a hablar inglés en rueda de prensa?
¿Se aprenderá el himno?
¿Se pondrá las gafas con los colores de Inglaterra?
¿Que hará con Almunia cuando sea seleccionable?
¿Es Inglaterra su último capítulo como entrenador?
¿Si gana el Mundial de Sudáfrica llamará primero a Calderón o a Mijatovic?
¿Que hará en el mes de junio?
¿Seguirá usando tinte del pelo en su periplo británico?
¿Convocará a Raúl? (error...)
¿4-5-1, 4-4-2 o 5-3-2?
¿Si le llama Berlusconi para ser Ministro de Deportes italiano, se iría?
¿Encargará jamón a Londres?
¿Confía en algún portero inglés?
¿Sabes usted que es muy difícil hacerlo peor que McClaren?
¿Cuanto cuesta un café en Londres?
¿Cuanto cobra?
¿Va a ir algún día en chándal?
¿Le gustan las pintas?

Cien partidos no son nada...

Hace unas semanas veíamos como David Beckham alcanzaba su partido cien con Inglaterra en una cita que le convertía en uno de los pocos privilegiados del fútbol mundial en superar ese número de convocatorias con su país. El diario británico The Guardian, casi siempre brillante en sus análisis, rebusca en el baúl de los recuerdos y habla de los jugadores que están cerca de alcanzar el centenario y de los que ya lo hicieron. Encontramos en esa lista como un tal Mohamed Al-Deayea de Arabia Saudí obstenta el liderato de internacionalidades con 181!!!! También aparecen cracks como Matthaus (150), Cafú (142), Jorge Campos (130) o Luis Figo con ya 127 partidos con Portugal. En cuanto a los jugadores de las islas que es lo que nos ocupa, ya les contábamos hace no mucho quienes eran los ingleses con más participaciones con su nación pero ahora les diremos quienes son los que lideran la clasificación en el resto de británicos junto con la República de Irlanda.

Dalglish, Staunton, Jennings y Southall
En Irlanda del Norte, Pat Jennings lidera la tabla con 119 partidos, jugó del 64 hasta el 86 y destacó su etapa en el mítico Tottenham Hotspur de la época donde jugó trece años. En Escocia, el líder indiscutible es un tal Kenny Dalglish (foto) que jugó 102 encuentros desde el 71 al 86. Quien no sepa que fue de lo mejor que se ha visto en las islas que se lo haga mirar, el más grande que ha dado Escocia nunca y si no, que se lo digan al Liverpool. Steve Staunton encabeza la lista de los que más han jugado con Irlanda. Este lateral izquierdo fue una de los integrantes de la mítica Irlanda de Jack Charlton y dueño y señor de esa banda desde el 88 hasta el 2002. Por último, Gales, que es la única que no tiene a ningún centenario con Neville Southall como el que se ha quedado más cerca con 92 apariciones. Por cierto, con España, Casillas está con 73 mientras que Raúl y Zubizarreta son los únicos en superar el centenario. En esta Eurocopa varios entraran en el prestigioso club de los cien.

Los siete son magníficos en Old Trafford

El siete es el número del éxito en Old Trafford. Desde que George Best lo hiciese famoso con la roja de los red devils allá por la década de los 60, ese número siempre ha estado ligado a varios de los mitos del Manchester United. Todos ellos reúnen carecterísticas similares entre las que destacan la calidad, la popularidad, el carisma y la polémica que suele acompañar a las estrellas de todos los grandes equipos. El mítico George Best fue el primer siete que idolatró la afición del United. Un jugador que ha dejado para el recuerdo no sólo su espectacular fútbol sino sus grandes frases y sus excesos con el alcohol. Hasta hoy, son muchos los que aseguran que Best es el fútbolista con más talento que ha vestido la camiseta del United. Su retirada dejó un vacío no sólo en lo futbolístico sino en lo espiritual ya que el Manchester perdió todo un icono convertido en mesías con el siete como símbolo.

Robson en tiempos difíciles
En los 70, el United experimentó una crisis que llevó incluso al equipo a descender a segunda división. Los tiempos de Busby, Charlton y Best quedaron muy lejanos y las borracheras de éxito dieron paso a la ley seca de trofeos. El Liverpool empezaba a triunfar y no fue hasta comienzos de los 80 cuando el Manchester empezó a sacar la cabeza y encontró a otro siete como ídolo. Best tenía su sucesor en Bryan Robson, no tan vertical como Best pero sí con un enorme talento y reconocido como uno de los mejores jugadores que ha dado nunca Inglaterra. Sin embargo, las lesiones y el resto del equipo no acompañaron en sus inicios hasta que Ferguson llegó en 1986. Noventa veces internacional con Inglaterra, Robson acabó su carrera en Old Trafford justo cuando el gran United de Ferguson empezaba a brillar. Cedió su número siete a un tal Eric Cantona que llegaba del Leeds para acompañar a Mark Hughes en la delantera. Robson y Cantona protagonizaron no sólo el relevo del siete sino también el relevo de la magia, la capitanía y la leyenda de los red devils.
Era Ferguson
Tanto Robson como Cantona formaban parte del equipo que ganó las dos primeras ligas del United después de 26 años de sequía. Cantona ejerció de auténtico salvador de una entidad que basó su proyecto en su figura. Tenía las dos caras de George Best y sobra decir que su carácter le jugó más de una mala pasada. A pesar de sus eternas polémicas, Cantona era el alma de ese Manchester y continuó con la leyenda del siete. Su cuello subido, su arrogancia y sus goles dejaron un recuerdo imborrable en el United. Una vez más el siete como número y un sucesor a la espera.

Becks se fue y llegó Cristiano
David Beckham emergía como una de las figuras de la cantera del United cuando Cantona decidió retirarse en 1997 dejando vacío el puesto del siete. Becks heredaba el número de la suerte con éxito similar al de sus predecesores aunque con menos calidad que ellos. El siete ganaba en carisma y perdía algo de fútbol aunque la leyenda permanecía. Curiosamente, en el verano de 2003, momento en el que Beckham abanonó el United, Ferguson fichaba a Cristiano Ronaldo. Muchos dudaban de que su fútbol estuviese a la altura de los mitos del siete. Ahora, sobra decir si ha sido un acierto o no. El siete en el Manchester sigue perteneciendo a una estrella y en estos momentos pertenece al mejor jugador del mundo. Best, Robson, Cantona y Beckham pueden estar orgullosos. El quinto siete también es ya una leyenda.

El despertar de Walcott

A pesar de su obra maestra en Anfield, la jugada de Walcott no pasará a la historia. Este chico de 19 años recién cumplidos está en el momento justo de revolucionar el fútbol inglés y sacar adelante ese gran futbolista que lleva dentro. Muchos dirán que su gol no tuvo mucho mérito aunque eso se debe más a la ignorancia o a la ceguera que se produjo después de ver el penalti que transformó Gerrard. La intensidad de los últimos minutos no nos ha dejado profundizar ahora en la insultante trayectoria de este joven de los gunners. Se trata de lo poco inglés que ha traído Wenger a su Arsenal, con eso ya se dice mucho. Tiene esa explosión de los grandes y ese desparpajo de las estrellas sin complejos que empiezan. Es el jugador inglés más joven en debutar con la selección, por delante de Rooney y Owen con 17 años y 74 días. Sin embargo, su carrera no ha comenzado de forma tan espectacular como la de sus compañeros.

Como Ronaldo en EE.UU 94
Quizás la presión mediática sobre él ha hecho que Wenger prefiera esperar una mayor madurez de un jugador que debe tener más minutos en este Arsenal. Después de su espectacular momento en Anfield, tiene que demostrar que todas las esperanzas puestas en su figura acabarán en buen lugar. Tiene la edad justa para explotar y si no lo ha hecho hasta ahora se debe más a una fragilidad mental más propia de su juventud que a otra cosa. Sven Goran Eriksson lo hizo debutar con Inglaterra demasiado pronto y encima lo llevó al Mundial de Alemania para luego no darle ni un minuto, caso este exactamente igual al de Ronaldo en Estados Unidos 94, salvando las distancias. El Arsenal debe confiar en él como una de la bases del equipo para la temporada que viene. Al mismo tiempo que la estrella de Owen parece apagarse, Walcott debe alimentar la dañada ilusión de Inglaterra tras no clasificarse para la Eurocopa. Ahora o nunca, querido Theo...

El otro fútbol sostiene al Liverpool

La Champions gana la leyenda del Liverpool pero pierde fútbol. Gana a Gerrard y a Torres pero pierde una propuesta atrevida como la del Arsenal. El Liverpool de Benítez ha jugado mejor en este partido de vuelta pero no lo suficiente para decir que ha merecido pasar la eliminatoria. Varios factores explican el bajón de los gunners. Hasta el comienzo del segundo tiempo no habíamos tenido noticias de los reds en toda la eliminatoria. En la segunda parte, la baja de Flamini ha sido vital para un Arsenal hundido físicamente y con Gilberto fuera de forma. Que el equipo de Benítez se haya encontrado delante a un conjunto destrozado en lo físico, no es mérito suyo. Con la pérdida de Eduardo, Rosicky, Van Persie tocado y Flamini, a este Arsenal le quedaban pocas alternativas. A Wenger hay que reprocharle su excesiva confianza en Senderos de penuria y sobre todo en lo triste que es ver como los pelotazos de Reina a Crouch no son frenados por una zaga tan experimentada.

Sensacional Walcott
Una vez más, el Arsenal cae en el viejo continente y tendremos una sesión de fútbol medio italiano con el Chelsea-Liverpool. Desde hoy, el Arsenal tiene que empezar a pensar en dar más minutos a Walcott que ya desde hace tiempo que pide paso. Su gol recuerda mucho al de Owen en Francia 98 aunque todavía tiene mucho que demostrar. Adebayor pide a gritos un acompañante con gol mientras que da la sensación de que este Arsenal se parece demasiado a la selección española en las fases finales, sobra decir el por qué. Ahora, todos los ojos puestos en el Liverpool. Mucho dinero, un equipo hecho a imagen y semejanza de Benítez y un estilo que funciona en Europa. Los aficionados de los reds siguen viviendo en ese oasis europeo sostenido por el talento de Gerrard, el estado de gracia de Torres y la magia de Anfield. Los que creemos que otro Liverpool es posible, creemos que no sería justo que ganasen más en Europa. Ahora bien, el Chelsea quizás ofrezca aún menos porque tiene más y mejores jugadores. En definitiva, vean la semifinal Manchester United-Barcelona, ¿mejor, no?

Wenger busca saldar su deuda con Europa

Decía Santiago Segurola en Radio Marca el pasado miércoles que al Arsenal de Wenger no se le podía criticar su labor en Europa porque había transformado el equipo de arriba abajo, que lo había modernizado y que le había alejado de la imagen pésima de aquel boring Arsenal de Tony Adams y compañía. Hasta ahí, todo correcto. Sin embargo, a estas alturas de su trayectoria, si no le pedimos al Arsenal de Wenger más en Europa caeremos en el conformismo y no en la obligación de todo periodista de exigir más a un conjunto que en campañas anteriores ha flojeado lejos de Inglaterra. El mejor Arsenal no fue el que llegó a la final de la Champions contra el Barça ni el de hoy pero extraña que los mejores gunners de Ian Wright, Dennis Bergkamp, Thierry Henry o Robert Pires se diesen un batacazo tras otro en la máxima competición continental. No cabe duda que, el Liverpool de Benítez en 2005, el Madrid de Heynckes en el 98 o el Oporto de Mourinho en 2004 no marcaron épocas pero sí que todos los grandes técnicos deben pasar el examen europeo que hasta hoy Wenger suspende.

Comienzo engañoso
En Anfield, el Arsenal debe demostrar que su propuesta tiene la madurez de un equipo fuerte en Europa y que deben sacarle mayor partido a sus ocasiones de gol. El comienzo de la temporada del Arsenal fue tan prometedor como engañoso. Dependió en exceso de la inspiración de sus jugadores del centro del campo y sólo Adebayor ha sido capaz de funcionar en la delantera. Con la plantilla que ha confeccionado Wenger, el equipo está rindiendo a un buen nivel aunque será ante el Liverpool cuando pase su prueba de fuego. A un técnico con tanto prestigio como Wenger se le debe pedir que sepa sacar adelante una eliminatoria ante un equipo tan previsible como el Liverpool. Que Reina es tan asistente como Laudrup en su día con el Barça o el Madrid lo sabe cualquiera que haya visto dos partidos de los reds este año. El gol de Crouch el Sábado habla de las carencias tácticas incomprensibles que a veces sufre este Arsenal. En Anfield y en la Champions y ante el Liverpool ya no hay excusas para que los gunners pasen de ronda. Si no, habrá que empezar a pensar que Wenger no es buen estratega en el viejo continente o que Benítez es insuperable, ustedes verán.

Radio Marca.- Liverpool-Arsenal y Chelsea-Fenerbahçe desde la 20.00
Artículo de interés: La década de Arsene Wenger

El indulto a Benítez

Rodrigo Marciel.- Que el Liverpool iba a salir como lo hizo en el Fly Emirates no debería ser una sorpresa para nadie. Que Gerrard es el hombre clave y pieza decisiva del engranaje red lo sabe cualquiera y que lo de meter nueve tíos atrás es una fórmula escasa para sacar algo positivo de los partidos sobra decirlo. Por eso, el Liverpool de Benítez debe tener algo más que esa pizca de suerte que acompaña a los campeones aunque cuesta descifrarla. El partido frente al Arsenal dejó claro que la propuesta de los gunners es cien veces más atractiva que la del Liverpool pero que tiene un problema ofensivo grave y los de Benítez tuvieron gran parte de culpa de que el Arsenal se ahogase en la táctica red. Ahora bien, ¿Hasta cuando va a aguantar la grada de Anfield este fútbol tan rácano?

La Copa de Europa de 2005
Antes de llegar a Anfield, el Liverpool que se encontró Benítez era un equipo que reclamaba antes que nada el éxito en la Champions y en la Liga. Sólo en 2001, con Houllier, parecía que el club renacía de sus cenizas después de una lamentable década de los 90. Ganaron UEFA, Copa, Supercopa de Europa, Charity y Copa de la Liga pero su eterna deuda seguía vigente, sin brillantez y sin apariciones por la Champions. Por todo esto, a Benítez se le exigió resultados antes que juego y con un fútbol muy discreto ganaron la Copa de Europa en 2005, hasta ahí excelente trabajo del técnico madrileño. Sin embargo, con el tiempo se ha demostrado que ese título ha hecho mucho daño a esta entidad que ha permitido que Benítez haya tenido crédito indefinido para seguir traicionando al estilo de Anfield con un juego más propio del fútbol italiano. En la liga, Benítez no ha logrado que en cuatro años nunca hayamos visto a los reds pelear por el título. Antes parecía que no había apoyo económico detrás pero con la llegada de los magnates estadounidenses la excusa de los comienzos ya no sirve. Al Liverpool de hoy hay que exigirle una propuesta más atrevida. Jugadores y dinero existen pero lo que debe terminar ya es el indulto a Benítez. Una tregua que debe caducar.

P.D. "El Arsenal se parece cada día más a las actuaciones de España en las fases finales!"

Las preguntas:
¿Gusta el fútbol de Benítez en Anfield?
¿Gusta ese fútbol o es que en Anfield se tapan los ojos porque ese tipo les dio
una Copa de Europa?
¿Que pensarán los magnates estadounidenses?
¿Le darán más dinero para que siga fracasando en la Premier y meta al equipo
atrás en Europa?

Matchpoint para Liverpool y Arsenal

Si hay algo a lo que está acostumbrado el Liverpool de Benítez en Europa es a reaccionar cuando nadie espera nada de ellos y a sacar fuerzas y calidad de debajo de las piedras cuando se acerca un partido decisivo de Champions. Ya lo han demostrado en momentos como la final ante el Milan o el partido de este año frente al Olimpique en Marsella. El romance de los reds en Europa y su buena trayectoria en los últimos partidos (a excepción de Old Trafford) dejarían en cierto favoritismo a los de Benítez para el partido de esta noche frente al Arsenal. Los de Wenger llegan a este choque en el peor momento de la temporada e incapaces de seguir el nivel del United en la Premier. Por ello, Wenger reservó ante el Bolton a varias de sus estrellas pensando más en el duelo ante los reds que en la liga.

El factor Adebayor
A este Arsenal le falta gasolina para alcanzar a Manchester y Chelsea pero ya demostró ante el Milan que le sobra ambición y ganas en el viejo continente. Aún escuece aquella final de Champions ante el Barça y Wenger parece que lleva semanas pensando en este cruce antes que otra cosa. La aportación ofensiva de Adebayor, Cesc y Van Persie va a ser clave y quizás todo esto sirva para pasar por encima del Liverpool. Europa es la asignatura pendiente de Wenger y este año el equipo sólo ha flojeado en Sevilla conscientes de que la clasificación estaba asegurada. Esa ansiedad y esa necesidad dan mayor favoritismo a los gunners a pesar de su pobre imagen en las últimas semanas. Este Arsenal, si juega al cien por cien, gana al mejor Liverpool.

El dato: Es la primera vez en la historia que ambos equipos se enfrentan en competiciones europeas

Radio Marca ofrece desde la 20.00 un especial de Marcador Internacional dirigido por Axel Torres en el que se cubrirán los partidos Liverpool-Arsenal y Fenerbahçe-Chelsea. Hagan el favor de escucharnos...

El ex Wimbledon gana su primer título

Recordabamos en Brit Corner en su sección de Equipos de Londres que el Wimbledon como tal ya no existe. El verano de 2002 supuso el final del Wimbledon de toda la vida cuando la FA permitió que un grupo empresarial comprase el club y lo trasladase a 75 kilómetros de Londres. Pasó a llamarse Milton Keynes Dons (dons, era el apodo del Wimbledon de siempre) y terminó con la etapa del viejo Wimbledon en Londres. Ahora lo que queda del esa equipo es el AFC Wimbledon que mantiene los colores y la sede del club en Londres aunque no tiene el respaldo económico del Milton Keynes que milita en la League Two. El actual entrenador del Milton Keynes es Paul Ince, un viejo conocido del fútbol inglés. El antiguo Wimbledon siempre será recordado por la etapa de Vinnie Jones y su fútbol del pelotazo y juego duro (la crazy gang- banda de los locos). Aquellos Dons alcanzaron la gloria en 1988 cuando ganaron la FA Cup al gran Liverpool de finales de los 80.

El comienzo de una nueva era
Hoy, 20 años después de aquella gesta, el Milton Keynes ha levantado su primer título. Se trata de una competición casi desconocida, la Football League Trophy o Johnstone's Paint Trophy según se quiera usar o no por la denominación que impone la publicidad. Este campeonato, que nace en 1983, lo suelen jugar los equipos de la League One y la League Two, una especie de competición copera entre los segunda b y los tercera en España. A pesar de la modestia de sus equipos, la final también se juega en Wembley y este año se la ha llevado el casi recién nacido equipo del Milton Keynes. No pierdan de vista a esta entidad con un importante potencial económico detrás y que entrena Paul Ince. Han ganado este modesto trofeo pero su aventura no ha hecho más que empezar, serán siempre odiados por los románticos fans del Wimbledon de antes pero están cerca de entrar en la élite. Estén atentos...